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Corregidora

Viene del sobrenombre con que se conoció popularmente a Doña Josefa Ortíz de Domínguez, heroína queretana de la guerra de Independencia de 1810. Esta área territorial y poblacional ha tenido diversas denominaciones, las cuales se han dado de acuerdo a fenómenos políticos y religiosos. En la época Prehispánica (según algunos historiadores) este asentamiento humano se llamó "Tlachco" por haber existido una construcción para el juego de pelota. Lamentablemente no existen testimonios al respecto. Por lo tanto, no se puede asegurar que esta denominación prehispánica sea correcta. Los límites del señorío de "El Cerrito" en la época Prehispánica se extendían más allá de la barrera natural que circunda el Valle de "El Pueblito", con montes y cerros; ya que no existen vestigios arqueológicos importantes dentro de él, aunque un poco más allá de sus límites actuales existían núcleos de población que bien podrían haber recibido su influencia: al suroeste, San Bartolo, Guanajuato; al sureste, Puerta de Tepozán, en el municipio de Huimilpan, Qro.; al norte, La Joya y Tlacote, en el municipio de Querétaro; y al noroeste, la Magdalena en el municipio de Apaseo El Grande, del mismo Estado.

Nada se sabe con respecto a los primeros pobladores de estos lugares; si bien ha sido posible investigar que tenían costumbres sedentarias. Por sus restos cerámicos y por su pirámide es posible pensar que procedían o que tuvieron amistad con los pobladores de Chupícuaro, Guanajuato y que tuvieron relación e influencia mutua con pueblos muy cultos como Teotihuacan y Tula. Con respecto a la pirámide "El Cerrito" y la región donde se asienta, se establece que su historia abarca un período de casi dos mil años; subdivididos en etapas que comienzan cuando algunos grupos humanos se dan a la tarea de edificar sus casas en tierras cercanas al Río del Pueblito, muy propicios para el cultivo. Estos lugares pueden estar identificados con los actualmente conocidos como El Pueblito, Santa Bárbara, La Negreta, El Recodo, El Shindó, El Molinito y La Cueva, entre otros. Para tal fin, esos antiguos pobladores desmontaron las tierras del valle y las laderas de los cerros; represaron y condujeron las aguas del río del Pueblito para aprovecharlas en sus sembradíos; abrieron caminos para comunicarse e hicieron de El Cerrito el primer núcleo de gobierno espiritual y político en la región.

Entre los años 400 a 600 de nuestra Era, las sociedades asentadas en el "Valle de Querétaro" produjeron en base a la explotación agrícola sus propios alimentos y fabricaron sus utensilios y enseres domésticos; teniendo como jefes políticos a los sumos sacerdotes. Al final de este período ocurrió la desintegración de Teotihuacan, que coincidió con el abandono de El Cerrito. Con el tiempo, el valle aumentó en pobladores; formándose en las centurias siguientes varios pueblos, autónomos unos de otros pero con las mismas costumbres y prácticas religiosas y culturales heredadas. A ellos se añadirían Puerta de Tepozán, San Bartolo, La Joya, Tlacote y La Magdalena. Entre los años 800 a 950 d.C., los conflictos entre los centros de población, que duraron más de dos siglos, concluyeron con una acción unificadora, sin que se sepa la causa que la motivó. Esta podría ser el resultado de que se hayan visto en peligro de ser sometidos por pueblos de otras regiones, o que alguno de ellos haya creado conflictos con sus vecinos; alcanzando la victoria y que esto diera lugar a un nuevo acomodo de la población y de la concentración del gobierno. Esto parece coincidir con el auge de los toltecas en Tula. En esa época El Cerrito vivió su segunda etapa de esplendor y fue el centro del gobierno espiritual y civil en la región. La pirámide fue ampliada y hermoseada; la agricultura y el trueque con comarcas vecinas propiciaron el progreso del valle, pero éste no logró durar mucho tiempo volviendo el lugar a quedar abandonado

De 950 a 1 450 años de nuestra Era, en el lugar se sucedieron situaciones diversas ya que se asentaron intermitentemente varios grupos. Existe la posibilidad de que algunas prácticas religiosas nacientes se hayan llevado a cabo en el viejo lugar para ceremonias El Cerrito, donde algunos de sus materiales, como son las lozas, hayan sido utilizadas para la construcción de casas. En los siglos XV y XVI el lugar volvió a ser un centro importante. Don Carlos de Sigüenza y Góngora, en sus Glorias de Querétaro (1680), dice que los Aztecas sometieron a los habitantes de estos lugares y pusieron instalaciones militares; aunque supone que por el Tlachco que existió en El Cerrito, éste fuera el nombre de la población, confundiéndolo con el Tlachco que se menciona en el códice Mendocino, mismo que agrupaba a otros pueblos de los Estados de Hidalgo y México, encabezados por Xilotepec. Los demás eran los siguientes: Tzayanalquipan, Michmoloyan, Tepetitlán, Acaxoxhitlán y Tecozautla, que están a más de cien kilómetros del valle de Querétaro.

En mayo de 1988, al cavar una zanja, se descubrió en la colonia Santa Bárbara, "en la parte media de la calle que se encuentra entre las manzanas 87 y 88 al extremo sur de la calle Benito Juárez sobre la terraza que da al río del Pueblito..." una ofrenda cuyas piezas fueron rescatadas para su estudio. (...) El asentamiento parece ser contemporáneo a la etapa I de El Cerrito (200 a 400 años a.C.), localizado a 3 km al norte de este lugar. Su posición en el recodo del río cerca de una presa de la época Colonial que derivaba el agua hacia las principales acequias que regaban el plan, hace factible la vinculación entre este lugar y El Cerrito, pudiendo ser el basamento de Santa Bárbara parte de un sistema territorial de ese antiguo centro". Este lugar, también llamado Cerro Gordo y situado al este de El Cerrito, a poca distancia de él y quizá unidos por una calzada que corresponde al alineamiento del recinto, tiene una plataforma de carácter cívico-ceremonial localizada en la cima del cerro. Los trabajos de urbanización de la colonia Zapata han fragmentado los diferentes componentes que conformaban los espacios sagrados, incluso en algunos casos las viviendas se encuentran encima de ellos. En 1991 al estar construyendo casas en la cima, se encontraron  numerosos collares y restos arqueológicos.

Por los años 1930 el Profr. Eduardo Noguera lo dio a conocer; más tarde el arqueólogo Carlos Margain diría que en "El Cerrito" hubo un establecimiento Tolteca, con influencia de la cultura Teotihuacana. En la época colonial se denominó Pueblo de San Francisco Galileo y más tarde, en 1830, el Congreso del Estado lo elevó a la categoría de villa, cambiándole el nombre anterior por el de "Villa Santa María del Pueblito". El nombre de Villa Corregidora se generalizó entre 1927 y 1929, durante la ley de cultos promulgada por el Presidente Plutarco Elías Calles. Sin embargo, no existen documentos oficiales que ordenen su uso. En 1931, esta comunidad fue elevada a la categoría de municipio (antes era Delegación Municipal Villa Corregidora) con el nombre de Corregidora por ley del Gobernador Interino Ramón Anaya, quien diera el nombre de "El Pueblito" para la Cabecera Municipal el 20 de mayo, y "Corregidora" para el municipio, el 30 de abril de 1931. El 21 de Febrero de 1939, el Congreso del Estado aprobó el proyecto de ley por el cual se constituyó definitivamente la delegación de Corregidora en Municipio de Corregidora.

Conquista de Querétaro:

El Cerrito es el lugar donde probablemente se llevó a cabo la Batalla de la Conquista, que los historiadores sitúan en el Cerro de Sangremal; basándose en datos que los investigadores han puesto en tela de juicio, ya que (según éstos) "El Cerrito" era en aquel tiempo el lugar más prominente en todo el valle de Querétaro (1531).

Conquista Espiritual:

La catequización y la enseñanza de la cultura europea a los indígenas quedó a cargo de los frailes Franciscanos; quienes venían periódicamente de la ciudad de Querétaro, donde residían hasta que en 1632 Fray Nicolás de Zamora, cura de Querétaro y encargado de la Doctrina en San Francisco Galileo, colocó secretamente una imagen de la Virgen María en el Misterio de la Purísima Concepción, al pie de la Pirámide del Cerrito, donde los moradores del lugar acudían a realizar sus prácticas religiosas tradicionales. Los indios se enamoraron de la imagen y abandonaron, en gran parte, sus propias creencias. En la centuria anterior los indios no opusieron resistencia a la predicación de los frailes y además, cumplían con sus deberes cristianos; no obstante, seguían practicando su propia religión, acudiendo para ello a El Cué con toda regularidad. Pero cuando se encontraron allí con la imagen mencionada, cifraron su cariño en ella; abandonaron la antigua religión y construyeron una ermita en donde ahora está el Santuario y la apellidaron "La Virgen del Pueblito", aunque el origen de la escultura está en la Ciudad de Querétaro. Inicialmente y hasta 1736 esta imagen estuvo en poder y al cuidado de los indios, quienes la empezaron a honrar con suntuosas fiestas y danzas que originalmente ofrecían a las divinidades de El Cué; dando así inicio a la más importante tradición que hoy existe en el municipio; pues ha ganado con el paso del tiempo simpatías en y más allá del valle de Querétaro; convirtiéndose el santuario en un punto de afluencia permanente de visitantes.

La Colonia:

Durante la época Colonial surgió propiamente el llamado Casco Histórico del Pueblito, con su iglesia parroquial y su Santuario, estrenados el 5 de febrero de 1736, y el Convento el 8 de julio de 1775. En esta época surgen los pueblos, haciendas y ranchos que fueron la jurisdicción del municipio y que en el año de 1791 figuraron en el “Padrón General de la Ciudad de Querétaro", que fuera levantado por el teniente coronel de caballería Don Ignacio García Rebollo, del cual tomamos lo siguiente: Por lo que respecta a la Hacienda de Balvanera, hay documentos que acreditan como propietario a Don José Ponciano de la Campa Cos por el año de 1765, hacienda de la cual se desprenden, pero sin dejar de pertenecer a ella, numerosos ranchos y otras haciendas, entre las que anotamos: Charco Blanco, El Jaral, Presa de Bravo, San Rafael, Purísima de la Cueva, La Negreta, Trojitas, El Ranchito, La Tinaja, Pita, La Cantera y El Romeral.

Época Independiente:

Hacia el final del siglo pasado surgieron obras materiales que cambiaron la fisonomía de la cabecera municipal, tales como el edificio que alberga la Presidencia Municipal, el Jardín Principal y el Puente Corregidora (ya desaparecido); la apertura de la Calzada Felipe Herrera, así como la apertura de la Calle Nueva, hoy Pedro Urtiaga, entre Felipe Herrera e Isidro Hernández. También destacan: la inauguración de la explotación de aguas, con la canalización del Ojo de Agua los días 3 de enero y 24 de Septiembre de 1903 y la inauguración del ferrocarril de mulas. Cabe mencionar que en el Batán, aprovechando el paso de las aguas a que nos hemos referido, operaba una turbina que movía un molino y una planta de energía eléctrica. Con las obras de encauce del líquido proveniente del Ojo de Agua se construyó una caída que movería las turbinas de una fábrica de cartón en el sitio que hoy se conoce como "€œLa Fábrica"€ dentro del Batán.

El municipio de Corregidora en la actualidad:

Hasta el año de 1939, nuestro territorio dependía de las autoridades estatales, las cuales delegaban su autoridad en un grupo de regidores, síndicos y jueces. Las denominaciones políticas fueron las de: Municipalidad, Delegación y Municipio (esta categoría la tuvo hacia el año de 1886 y hasta 1939. Sin embargo no se eligió presidente municipal, y siguió siendo gobernado por el grupo de regidores). Algunos de los edificios que dan identidad al municipio fueron construidos en el siglo XVIII, el Santuario de la Santísima Virgen del Pueblito el 5 de febrero de 1735, la Parroquia de San Francisco Galileo, probablemente de la misma época. Otros, como el Palacio municipal, el jardín y el quiosco, fueron construidos a finales del siglo XIX. Siendo gobernador del Estado el Coronel Ramón Rodríguez Familiar, envió una propuesta de ley a la XXXI Legislatura del Estado libre y Soberano de Querétaro, Arteaga, con el objeto de que el territorio del Estado se dividiese en 11 municipalidades, a saber: Amealco, Arroyo Seco, Cadereyta, Colón, Corregidora, Jalpan, Pinal de Amoles, Querétaro, San Juan del Río, Tequisquiapan y Tolimán. Esta propuesta, dio origen a la Ley Nº 57 por medio de la cual la XXXI Legislatura elevó a estas municipalidades a la categoría definitiva de Municipios (30 de junio de 1939) El primer presidente constitucional del municipio de Corregidora fue Pompeyo Herrera Uribe. En el pasado reciente el Ayuntamiento 2000-2003, presidido por el Lic. Luis Antonio Zapata Guerrero, se dieron hechos relevantes para el municipio, tales como dotar de  un nuevo edificio a la Administración Pública Municipal; eligiendo para ello el edificio que se encuentra en las faldas de El Cerrito, (Pirámide del gran Cué), lugar histórico muy apreciado por los habitantes de este lugar, por haber estado en ese sitio en el año de 1632, la Imagen de la Santísima Virgen del Pueblito. En el último tercio del siglo XX, aquí se construyeron las instalaciones que ocupó la Universidad Marista. Las autoridades educativas de esta Institución (CUMDES), reformaron totalmente el casco de la exhacienda y lo convirtieron en oficinas modernas y funcionales. Es importante mencionar, que en este sitio estuvo la Hacienda del Cerrito, que fuese propiedad de los Fernández de Jáuregui. En el 2000, el gobierno municipal de Corregidora ocupó dichas instalaciones e inició actividades oficiales el 15 de enero del 2002. Otro hecho destacado para la vida municipal fue la firma de reconocimiento definitivo de los límites territoriales del municipio, en acto formal realizado el 14 de agosto del 2002 en el Teatro de la República.

Por otra parte, cabe mencionar que la cabecera municipal sólo contaba dos espacios recreativos: el jardín principal y "la placita". Ésta última enclavada en las calles de fray Sebastián Gallegos, Hidalgo y Bermúdez. El crecimiento de la población exigía espacios apropiados para realizar los actos sociales, y por esa razón el C. Aarón Patiño Casas, presidente municipal, (1970-1973) construyó en terrenos de la Placita el auditorio municipal, que desde su construcción hasta el año 2003, cumplió una función social de gran importancia. Sin embargo, la expansión de la mancha urbana, el exceso de ruido, la falta de espacios para estacionamiento público, etc, obligaron a la demolición de este edificio, rescatándose la antigua "Placita", inaugurada oficialmente el 28 de septiembre del 2003. Ésta cuenta con instalaciones modernas y luce nuevamente la estatua del Cura Don Miguel Hidalgo y Costilla. El día 17 de diciembre del 2002, se encendió el alumbrado de la Pirámide del Pueblito, la cual luce orgullosa y majestuosa, desde varios sitios aledaños, el día primero de enero del 2004, se bendijo el sitio en que será colocada una imagen monumental de la Santísima Virgen del Pueblito; este lugar se encuentra en lo alto del Shindó, (cerro gordo) en la colonia Emiliano Zapata.

Atractivos Culturales y Turísticos:

Atractivos Turísticos:

Pirámide del Gran Cué (Cerrito): A 8 kilómetros de la capital del estado.

Club Hípico Balvanera: A 8 kilómetros de la capital, sobre la carretera libre a Celaya.

Rancho La Pitaya, SPA: A 12 kilómetros de la capital sobre la carretera libre a Celaya.

Monumentos Históricos:

Pirámide del Gran Cué (Cerrito): Se localiza a 8 kilómetros al Sur de la Capital del Estado; tiene gran similitud con la pirámide de la Media Luna de Tula, Hidalgo. Su arquitectura es de marcada influencia Teotihuacana.

Santuario y Convento de la Santísima Virgen del Pueblito: Se localiza a 8 kilómetros de la Capital del Estado, en el centro de la cabecera municipal. El Santuario se estrenó el 5 de febrero de 1735 y el Convento en 1775. Su arquitectura corresponde al Barroco Mexicano. El interior del santuario tiene piso de piedra de San Andrés. De este mismo material es el hermosísimo altar, la catedral, el trono y el piso de la Capilla Votiva.

Santuario de Nuestra Señora del Cerrito.

Fiestas, Danzas y Tradiciones:   

En El Pueblito, cabecera municipal de Corregidora, y en algunas de sus comunidades, existen prácticas y costumbres para la celebración de las diversas fechas tanto del calendario cívico como del religioso. El probable inicio de estas tradiciones se remonta al año de 1632, fecha en que el religioso Franciscano Fray Nicolás de Zamora colocó en el adoratorio que tenían los grupos indígenas en la Pirámide del Gran Cué, una imagen de la Purísima Concepción para realizar la conquista espiritual de los antiguos pobladores de estas tierras. A partir de entonces nacen las Corporaciones, Mayordomías y Agrupaciones que se encargan de realizar, año con año, las fiestas y ceremonias para festejar al Santo Patrón o Patrona.

 

La más importante de las corporaciones es la llamada "Corporación de Mayordomos y Tenanches". No se conoce con exactitud la fecha de la fundación de esta agrupación, pero si se toma en cuenta que al ser sustituidas las divinidades prehispánicas por la imagen que hoy se conoce como "Virgen Santísima de El Pueblito", los indígenas reclamaron como de su propiedad la imagen recién conocida. A efecto de dirimir el conflicto, los religiosos, en la imposibilidad de entregarles la imagen original, les ofrecieron una réplica de ésta para que le rindieran culto en sus domicilios particulares; dando inicio así a la corporación de mayor tradición. El 18 de febrero de 1686 se fundó una cofradía de indios en honor a Nuestra Señora del Pueblito.

 

Dentro de las actividades profano-religiosas propias del culto, destacan por su vistosidad: el Paseo y Bendición del Buey; el Lunes del Caldo; el Paseo de las Parrandas; el Conteo de la Pastilla; la Elección del Nuevo Mayordomo; el Tratol; la Misa del Juramento y el Encuentro con el Señor de la Savanilla. En todas estas celebraciones participan las autoridades civiles y religiosas y por supuesto una gran cantidad de personas. "Lunes de las fiestas"; a medio día y por la noche de este mismo día se efectúa la ceremonia de la "Remuda" donde los miembros de la corporación entrante con los de la corporación saliente se conocen entre sí. Este acto y la recepción de la imagen por la nueva mayordomía son avalados por el padre guardián del Convento de Nuestra Señora del Pueblito y por el presidente municipal. Este mismo día se lleva a cabo la votación para elegir al monarca, al primer mayordomo y a la primer tenanche que sucederán a los actuales.

 

Semana Santa:

Cada lugar tiene su propia forma de dar realce a los eventos que en coordinación con sus autoridades eclesiásticas programan; los cuales son preparados (en algunos casos) con bastante anticipación. En los eventos profanos, en muchas partes se escenifica la "Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo" por medio de grupos teatrales; los cuales están conformados por "fariseos", "mujeres piadosas", "centuriones", "autoridades", "angelitos" y desde luego todos los personajes que intervienen en la representación de la Pasión y Muerte de Cristo. Hace muchos años se fundó uno de los grupos representativos de mayor trascendencia en la comunidad de "La Negreta"; razón por la cual a este lugar se le conoce como "Galilea o Tierra Santa". Dentro de todos los grupos que intervienen en la conmemoración de "Las Tres Caídas" participa el "Coro de Angelitos" que distingue dicha celebración. Hace poco más de cincuenta años se formó una corporación a la cual se le dio el nombre de "Corporación de San Ramón"; y que tiene como santo patrono una imagen de "El Divino Salvador"; misma que, el Domingo de Ramos se lleva en procesión a "Misa". Las personas que acompañan a esta imagen llevan ramos de "romero", "palmas", "rosas", entre otros. Un artillero antecede la procesión y tiene la misión de anunciar la presencia de la imagen haciendo estallar sus cohetes. Desde luego no falta la banda de viento. Al llegar a la parroquia se celebra una misa solemne. Después de la Santa Misa, la imagen es llevada en procesión a la casa del primer mayordomo de la corporación.

El Lunes Santo se lleva a cabo "El Encuentro" que consiste en el recibimiento (a un costado inferior del Cerro de la Mesa) que los fieles, y en especial los miembros de las corporaciones, hacen a la imagen del "Señor de la Savanilla". Acuden al "Encuentro", la imagen del "Divino Salvador", la imagen de "Nuestra Señora del Pueblito", de los naturales con sus mayordomos, tenanches y algunas otras. Al llegar al lugar del encuentro se realiza la ceremonia  de bienvenida a la imagen, a cargo de las personas responsables de los "sahumerios" de la corporación correspondiente. Una vez concluida la ceremonia del recibimiento se dirigen todos los participantes con sus respectivas imágenes al templo parroquial, donde permanecerán toda la Semana Santa para su veneración.

El Jueves Santo, por la noche, se realiza el tradicional reparto de "La Calabaza" en la casa del primer mayordomo de la Corporación de Mayordomos y Tenanches. El Viernes Santo se lleva a cabo el reparto de los "nopales y los camarones". También se coloca una "anda" (estructura de madera de aproximadamente 8 por 2.50 m) con la imagen del Señor de las Tres Caídas en el portal anexo del templo parroquial. Al centro se coloca una imagen de tamaño natural de Nuestro Señor Jesucristo, al cual se le coloca una cruz sobre los hombros. En las partes circundantes de la anda se suben por turnos niñas vestidas de "angelitos" y también "La Verónica", las mujeres piadosas y "La Dolorosa", entre otros. El Viernes Santo, después de los tribunales, se conmemora el Viacrucis; siendo transportada la anda durante su recorrido por hombres de diferentes comunidades y miembros de la Asociación del Señor de las Tres Caídas. Por la tarde, se lleva a cabo en los dos Templos la Procesión del Santo Entierro y el Sábado Santo se realiza la Vigilia de Resurrección, la bendición del agua, del fuego y el encendido del Cirio Pascual. La corporación del Divino Salvador, una vez terminada la Misa de Resurrección, asiste a la casa del primer mayordomo de la Corporación de Mayordomos y Tenanches para hacer una visita a la imagen de Nuestra Señora del Pueblito. El Domingo de Resurrección por la mañana, en la casa del primer mayordomo, se reparte atole y pan a todas las personas que asistan y al final se queman los tradicionales "Judas". También los mayordomos de la corporación del Divino Salvador reparten atole y pan. Fiestas del Tercer Viernes: Estas fiestas se celebran en sábado y domingo para realizar el cambio de Corporación de los Mayordomos y Tenanches, tres domingos después de las fiestas de febrero.

Danzas:

Danza de los Adultos: Está comprendida por el personal que forma a las corporaciones de las danzas; la primera y la segunda; o sea que éstas se dividen en danza de niños y danza de adultos que son quienes cierran las actuaciones diarias de los niños. La danza de los Adultos comprende tres grupos de bailarines que son los frachicos, baltasares y la muerte, y los apaches.

Flachicos: Personajes que usan máscara y se visten con las prendas más extravagantes que por lo regular ellos mismos confeccionan, llegando a usar como ropa, cartones y costales de ixtle, pues su cometido es divertir al público a través de su atuendo, sus movimientos y parlamentos.

 

Baltazares: Más comúnmente llamados "Diablos". Su vestuario se compone de calzón hasta la media pierna que adornan con cascabeles de latón; camisa cerrada que no se fajan, hecha de tela lustrosa de colores negro, rojo, verde oscuro y rosa, que pueden combinarse o ir de uno sólo; paño rojo grande con el que se cubren la cabeza. Su máscara tiene unos grandes cuernos de chivo, cejas y bigotes de pelo y lengua de género rojo; la máscara se pinta de color rojo o negro y se delinea con rayas o puntos dorados o plateados. Llevan además una horquilla o trinche de cinco dientes. El diablo durante su actuación es mudo y para comunicarse se vale de su trinche con el que señala y "tienta" a las personas.

 

La Muerte: Su atuendo consiste en pantaloncillo ajustado, camisa cerrada de manga larga y morral que le sirve de máscara y le cubre totalmente la cabeza hasta el cuello; todo este ropaje es de color negro, lleva pintado el esqueleto humano por el pecho y por la espalda. Porta su hacha de madera y su machete o guaparra. Es el jefe de los baltasares con los que baila siempre a la cabeza. No habla, se comunica a través de señas valiéndose de su hacha. Es traviesa, huidiza y muy saludadora.

Los Apaches: Son el reverso de la medalla de los anteriores. Son muy serios, no bailan, ni saludan, ni son traviesos. Su papel lo desarrollan en el momento de actuar. Se caracterizan por su seriedad y destreza. Su vestuario es una camisa cerrada, de manga corta; calzones hasta la mitad de la pierna, de manta con dibujos hechos por ellos mismos, llevan cascabeles de latón que dan un sonido peculiar cuando caminan y danzan; sombrero de palma y su guaparra. Uno de ellos es el jefe y los encabeza cuando danzan. En los recorridos van formados en dos filas y emiten el grito apache al llegar a las esquinas; también ejecutan luchas a guaparrazos. Corporación de mayordomos y tenanches en las calles del Pueblito.

Artesanías:

Aunque no se cuenta con una tradición artesanal, se elaboran máscaras de madera con cuernos de chivo.

Gastronomía:

Pan de atole, nopales en bota, camotes horneados, pan de yugo, chalupas y tortillas de colores.

Municipio Corregidora

Estado Querétaro
Cabecera Villa del Pueblito
Población 143 073 hab.
Gentilicio
Municipios de Querétaro
Superficie 246 km2
Información proporcionada por el Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (INAFED)
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