Se muelen los ajos, la canela, la pimienta, los clavos, las yerbas de olor, el jugo de limón y la sal y con esa mezcla se unta la gallina por dentro y por fuera y se deja reposar varias horas para que el sazón le penetre bien.
Por separado se ponen a cocer las papas. Una vez cocidas se cortan en cuadros y se les agrega la cebolla y el perejil, así como la pimienta, las yerbas de olor, la crema, los huevos crudos y los pepinos picados.
Se le pone un poco de sal. Con esta mezcla se rellena el ave, cosiendo con hilo grueso para cerrar la cavidad.
Se embarra por fuera con jugo de limón y mantequilla y se mete al horno a 250°C (482ºF) en un molde hondo donde previamente se echó una taza de agua, hasta que se sienta suave la carne.
Se acompaña con el chileajo. Para preparar éste se remojan los chiles y se muelen con el ajo, las especias y el orégano. Se fríen en poco aceite y cuando está todo bien frito se agregan los tomates molidos con el pan.