La comida hidalguense es variada y abundante; destaca su gran cantidad de tamales, entre los que encontramos el zacahuil y el xohol de la zona huasteca, realizados a base de masa de maíz, envueltos en hoja de plátano y cocidos en hornos de leña. El primero es salado y lleva carne de cerdo, de pollo o de guajolote aderezado con salsa roja o verde. El segundo es de masa de maíz endulzada con piloncillo. Ambos son de gran tamaño, pues llegan a medir hasta metro y medio.
Otra variedad procede de la Sierra Tepehua donde tenemos los "trabucos", que son tamales pequeños en los que a la masa de maíz se le agrega cacahuate molido y alguna salsa o bien se aderezan con piloncillo despedazado, otro tipo más, es el de los "tecoquitos", confeccionados a base de maíz cocido y reposado al que se añade salsa picante y se consumen con atole de semillas de girasol.
Otros platillos a base de maíz son los "molotes", pequeñas gordas un poco alargadas y rellenas de alberjón, frijol o haba molida y se les agrega un poco de salsa picante y manteca de cerdo. En la Huasteca se acostumbran los "bocoles", que son gorditas de maíz precocidas y untadas con manteca de res o cerdo. En varias puntos de la Altiplanicie, se confeccionan también los "peneques" que en algunos lugares se conoce como tlacoyos, que son gordas de maíz rellenas de alberjón, que se sirven en caldillo de chile verde y se aderezan con queso, rábano, cebolla y cilantro. Todo ello sin olvidar las enchiladas verdes o rojas, que con ligeras variantes se acostumbran en toda la entidad.
Famosa en la región del Valle y los llanos es desde luego la "barbacoa" de carnero o de pollo, que se cuece en un horno cavado en la tierra, sin olvidar el tasajo y la cecina de la Huasteca y la Sierra.
Los gusanos blancos de maguey o rojos llamados chinicuiles y los huevecillos de hormiga denominados escamoles, que solos o mezclados con huanzontles, nopales tiernos, etc. Son regios platillos en el Altiplano donde hay más de cien combinaciones.
En Pachuca y Real del Monte deben mencionarse los "Pastes" bocadillo traído por los ingleses, que se elabora con pasta de harina de trigo, rellenas de papa, poro, cebolla, un poco de chile y pedazos de carne de res o de pollo.
Hay también una gran variedad de dulces, tales como las palanquetas hechas con azúcar y piloncillo y aderezadas con nuez o cacahuate; las trompadas y charamuscas de piloncillo, el jamoncillo de pepita de calabaza, las famosas alegrías realizadas con semilla de amaranto, frutas cubiertas, mermeladas y diversidad de galletas y panecillos entre los que destacan las llamadas “frutas de horno” de la zona de Tianguistengo que son realizadas a base de harina de trigo.
Se añade a lo anterior un gran número de bebidas entre ellas el pulque de los llanos de Apan, que puede consumirse blanco o curado con diversas frutas de la estación y los aguardientes frutales, que se fabrican el alambiques caseros en Tlahuelompa o Acaxochitlàn donde es famoso un vinillo llamado acachul, que proviene de una planta de ese nombre que da frutos muy parecidos al capulín, en este último lugar se ha logrado industrializar la sidra, tipo Asturiana, debido a la gran cantidad de huertos de manzana que allí existen.
Aquí podrás encontrar algunos ricos platillos típicos de Hidalgo: